Conflictos con el rótulo
Los rótulos en las fachadas suelen provocar conflictos entre los propietarios de locales y las comunidades de propietarios.
En estos casos, lo primero que debe hacer es verificar qué dicen los estatutos de la comunidad. Pueden darse tres circunstancias:
- Que prohíban la instalación de rótulos (circunstancia poco frecuente). En ese caso, no podrán instalarse.
- Si autorizan la instalación y se cumplen las condiciones de los estatutos -si las imponen- y lo establecido en las ordenanzas municipales, la comunidad de propietarios deberá aceptar la instalación.
- Pero lo más probable es que los estatutos no establezcan ni una prohibición ni una autorización expresa. En estos casos, la regla general de los tribunales es aplicar un criterio favorable a la colocación de rótulos (sin necesidad de una autorización específica de la comunidad).
Eso sí, deben respetarse unos límites. Por ejemplo, que el rótulo no perjudique a alguno de los propietarios (por ejemplo, porque obstaculiza las vistas o causa molestias de luz o ruido). Además, el rótulo no puede alterar de forma significativa la configuración exterior de la finca. Por ejemplo, se ha considerado que existía esa alteración en el caso de una finca clásica en la que se colocó un letrero voluminoso con signos orientales.
Por tanto, si con su cartel no se produce ninguna situación de este tipo (ni perjuicios ni alteración grave de la configuración exterior de la finca), se considerará que el local está haciendo un uso normal de un elemento común (la fachada). Dicho uso, además, es imprescindible para explotar comercialmente el local.
Los profesionales de Sayma le asesoran en cualquier conflicto que se le plantee en el día a día de su negocio.
Fuente: Lefebvre